Tres lecciones del océano para Bombette, cofundadora de NOMB Changes
Una vez al año, el World Ocean Day nos recuerda la inmensidad, la belleza y la fuerza del mar – y nuestra profunda conexión con él. En NOMB Changes creemos: el surf es mucho más que un deporte. Es una maestra, un espejo, una amiga.
El mar no solo moldea olas – también nos moldea a nosotras y nosotros.
Aquí van tres lecciones que el mar me ha enseñado – a través de la sal, el stoke y el flow.
Soltar – y abrirse
Allí afuera, en el line-up, se hace evidente rápidamente: al mar no le interesan tus planes. El pronóstico puede prometer condiciones perfectas – pero de repente el swell se debilita o aparece un set inesperado. Aprendes a leer el mar, a reaccionar – pero nunca a controlarlo.
En el agua, me resulta fácil abrirme a lo que viene – porque sé que no puedo cambiarlo.
Las olas me enseñan a adaptarme. A remar cuando es el momento. A hacer un turtle roll si es necesario. A sentarme, observar, esperar – y sentir.
En la vida cotidiana y en las relaciones humanas, esto a veces me cuesta más. Intento dirigir conversaciones, influir en resultados, anticipar reacciones. Pero el mar me enseña: cuando suelto, se abre espacio – para una ola perfecta, para un encuentro inesperado, para conexión, para profundidad.
Esperar menos – vivir más
Hay días en los que todo parece anunciar “no va a haber buen surf”: viento onshore, olas pequeñas, cielo gris, agua fría, lluvia. Y aún así, remo hacia fuera. No porque espere un milagro – sino porque sé: siempre vale la pena.
Quizá no atrape la ola del día. Pero siento la sal en mi piel, me río tras un wipeout, o comparto una ola con alguien que está igual de stoked que yo.
Cuando suelto expectativas, la alegría está mucho más cerca.
En el surf – como en la vida – esta actitud lo cambia todo. En vez de enfocarme en lo que debería ser, empiezo a ver lo que es: un delfín en el horizonte. Rayos de sol que bailan sobre el agua. Un arcoíris, dibujado entre la lluvia y el sol. Una sonrisa en el line-up. Y esa voz suave en mi interior que me dice: esto es suficiente.
Aceptar tus límites – y aun así volver a intentarlo
A veces, el mar es duro. Hay olas que no logro atrapar. Corrientes contra las que no puedo luchar. Momentos en los que dudo, tengo miedo o simplemente no puedo más. Me frustro. Me canso. Me siento pequeña
Pero el mar siempre me da una nueva oportunidad.
La próxima sesión. La próxima remada hacia fuera. La próxima respiración.
Me recuerda: los límites no son un fracaso – son un feedback. Una invitación a parar, reflexionar y seguir adelante. En el surf, como en la vida, el crecimiento viene en fases. Ola tras ola. Intento tras intento.
Y a veces, el mayor logro es simplemente volver a estar en el agua.
Este World Ocean Day, tómate un momento y escucha lo que el mar tiene para decirte. En NOMB Changes nos inspiramos cada día en estas lecciones – y en el cambio positivo que surge cuando nos encontramos con las olas, con las personas y con la vida oceánica con el corazón abierto.
¡Feliz World Oceans Day! 🌊